En el año 2022, las Fuerzas Armadas y de Orden (incluyendo Ejército, Carabineros, Fuerza Aérea y Armada) gastaron $310.896.083 CLP en bebidas alcohólicas tales como licores, vinos, cervezas y espumantes
Los detalles por institución fueron los siguientes:
Ejército: $166.321.067 CLP
Carabineros: $50.593.948 CLP
Fuerza Aérea: $45.143.788 CLP
Armada: $6.914.648 CLP
En cuanto al tipo de bebida, las compras se distribuyeron así:
Licores: $161.484.550 CLP
Vinos: $86.823.203 CLP
Cervezas: $50.177.861 CLP
Espumantes: $9.547.796 CLP
Cócteles: $2.844.695 CLP
Vinos fortificados: $17.978 CLP
Estas cifras desataron críticas en el ámbito político. El diputado Luis Cuello (PC) calificó el monto como “exorbitante” y ofensivo en un contexto con urgencias sociales prioritarias. Mientras que el diputado Leonardo Soto (PS) cuestionó si el consumo de alcohol era compatible con funciones públicas y lamentó el daño al prestigio institucional
La tendencia no disminuyó. En agosto de 2025, ya se habían gastado $389.147.882 CLP en alcohol, sin contabilizar festividades como Fiestas Patrias o fin de año
La distribución por tipo de bebida fue:
Destilados: $220.163.581 CLP
Cervezas: $99.876.678 CLP
Vinos: $37.344.028 CLP
Cócteles: $27.757.291 CLP
Espumantes: $3.990.233 CLP
Y el acumulado en los últimos cinco años (2021–2025) superó los $2.221 millones CLP, distribuidos así:
Ejército: $1.484 millones
Fuerza Aérea: $356 millones
Carabineros: $334 millones
Armada: $46 millones
Desde el Ejército, se señala que estas adquisiciones se hacen a través del Sistema de Bienestar, financiado por aportes voluntarios de los afiliados al sistema recreacional (clubes, casinos militares, etc.), y no provienen del presupuesto estatal directo
Carabineros sostuvo una posición similar, indicando que los gastos se financian desde recursos internos del sistema de bienestar institucional —incluyendo centros de descanso y otros complejos recreativos— y no con fondos públicos del Estado
Sin embargo, esta explicación no ha disminuido las críticas desde el mundo político, que cuestionan la legitimidad del consumo de alcohol en instituciones públicas dedicadas a la seguridad y defensa, incluso si se financia con recursos alternativos
Resumiendo: En 2022, las fuerzas uniformadas y Carabineros gastaron aproximadamente $311 millones en alcohol.
Hasta agosto de 2025, esa cifra subió a casi $389 millones, con un acumulado de $2.221 millones en cinco años.
El Ejército lidera los desembolsos, seguido por la Fuerza Aérea, Carabineros y Armada.
Las compras se financian desde sistemas internos de bienestar, aunque esto no ha sido suficiente para calmar las disputas políticas.
